El mundo de las sillas de oficina es amplio y a veces aparecen dudas sobre qué modelo nos resultará más útil en nuestro caso. Además la definición de cada silla a veces tampoco ayuda a diferenciar o hacernos una imagen de qué modelo se trata. En este artículo vamos a enumerar las diferentes denominaciones de sillas y qué significa cada una de ellas.

Se trata de las sillas de oficina clásicas que se utilizan para trabajar en oficina. Generalmente hace referencia a las sillas giratorias y nivelación en altura. Estas sillas están disponibles en infinidad de versiones, formas y con o sin apoyabrazos.

La silla interlocutora es aquel modelo de silla que acompaña a una silla o sillón de dirección. Generalmente se trata de una silla thonet o una silla clásica con cuatro patas. La silla thonet es aquél modelo de silla que se soporta sobre dos barras situadas paralelamente una al lado de la otra en forma de U. En la parte superior de esa U es donde se encuentra el asiento. Las sillas interlocutor normalmente serán más discretas y simples que las sillas a las que acompañan, con líneas más sobrias y comedidas.

La descripción de esta silla habla por sí sola: contacto permanente con nosotros. No obstante esto no nos da ninguna pista sobre qué parte del cuerpo está en contacto permanente con la silla y se refiere a una silla con respaldo ajustable en altura, ángulo de inclinación y profundidad, para que lo que esté en contacto permanente con la silla sea nuestra espalda. Este tipo de silla es muy utilizado para escritorios juveniles, ya que ayuda a los más jóvenes a mantener siempre la espalda recta.

Este tipo de silla permite que el movimiento del respaldo y el asiento se realice simultáneamente. Esto significa que el respaldo puede fijarse en el ángulo deseado por el usuario y a la vez se regula la inclinación del asiento; por eso se denomina silla de “mecanismo sincronizado”. Cuando liberamos el mecanismo de la silla podemos “balancear” el asiento y el respaldo a la vez de forma solidaria (directa). Este tipo de silla está pensada para el usuario intensivo que va a pasar más de 4 horas al día sentado.

La sillas con mecanismo basculante están dentro del rango medio/alto de la gama de sillas de oficina. Normalmente además de este sistema este tipo de sillas incorporarán otras prestaciones adicionales. Que una silla sea de tipo mecanismo basculante significa que toda la silla (asiento y respaldo) se pueden inclinar hacia atrás. Además se puede fijar en varias posiciones pero siempre manteniendo el mismo ángulo de apertura entre asiento y respaldo.